
En un ambiente realmente muy curioso debido a la falta de una verdadera difusión masiva sobre las posibles incidencias de lo que en este evento sucederá, la ciudad de Bucaramanga se apresta a vivir este sábado 25 de abril la Convención Departamental del Partido Liberal, que escogerá los candidatos de esa colectividad a la gobernación de Santander, las alcaldías del departamento y se avalaran nombres de las listas a la asamblea departamental y los concejos municipales.
Mientras vanguardia.com prácticamente no cubre en su información de hoy lo que en otras épocas era un suceso para los más grandes titulares del diario de la calle 34, el diario El Frente ofrece una versión dudosa que indica que, por motivos familiares, el ex parlamentario Didier Tavera declinaría sus aspiraciones a la gobernación de Santander. Como todos sabemos, Rafael Serrano Prada es prácticamente uno de los jefes del partido conservadores regional y su diario trataría de crear un desconcierto en la opinión pública santandereana y dentro de las filas rojas.
La puja liberal para la gobernación de Santander y la alcaldía de Bucaramanga estaría circunscrita a las aspiraciones de Carlos Ibáñez Muñoz, René Garzón Martínez, Carlos Alberto Morales Delgado, Honorio Galvis Aguilar, Yolanda Blanco Arango, Mario Suárez Flórez y Jorge Gómez Villamizar. Pero como en los cónclaves papales, hasta no ver humo blanco lo que se diga sobre el particular hace mas parte de la picaresca política que de la realidad. Como se sabe en torno a la nominación principalmente de la Gobernación de Santander y la Alcaldía de Bucaramanga hay muchos y poderosos intereses en juego, y no siempre antes de llegar a un evento de estas magnitudes todos los interesados ponen sus cartas sobre la mesa.
Y esta en consideración el cuestionamiento en cuanto a la real capacidad del partido liberal santandereano para ganar, solo, estos dos cargos. Así que mientras llega el mediodía de éste sábado, cuando se podría saber realmente como juegan los rojos esta vez a nivel regional, pueden hacer todavía sus apuestas señores. Porque realmente allí cualquier cosa puede pasar.